Descripción
Esta ilustración tiene una historia… y dice así:
Yo tenía una cámara submarina. Y desde hacía mucho tiempo, quería visitar la Cala Macarella en Menorca y bucear allí, porque había visto fotos y me encantaban sus colores.
En el verano de 2022 fui con unas amigas de viaje a Menorca, ¡por fin!, y me llevé la cámara submarina. La cámara tenía ya más de diez años, pero en ningún momento pensé que ese iba a ser su último viaje, y sus últimas inmersiones en el Mediterráneo.
De hecho, murió en la cala Macarelleta. Se filtró agua dentro de la cámara, y ya nada ni nadie pudo revivirla.
Es por eso que cuando llegué a casa, aquel verano, basándome en otras fotografías de la playa, y comprando y mezclando múltiples tonos de acuarelas líquidas azules, intenté conseguir los colores de la cala… y con toda esa experimentación artística, la tristeza por haber perdido la cámara, y la ilusión de crear algo nuevo… nació esta ilustración.

